La posibilidad de cortar ayuda europea a Gaza tras el ataque de Hamás a Israel abre grietas en la Comisión y entre países de la UE

La guerra entre Israel y Hamás tras el ataque de este último este fin de semana ha provocado este lunes hostilidades dentro de la UE, a cuenta de la ayuda al desarrollo y humanitaria europea a Gaza, que en buena medida sostiene la vida en la Franja. A lo largo de la jornada, el comisario de Ampliación y Vecindad anunciaba la suspensión "inmediata" de la ayuda al desarrollo y poco después replicaba el comisario de Gestión de Crisis, asegurando que la ayuda humanitaria, de la que es responsable, se mantendrá el tiempo que sea necesario. A última hora de la tarde, la Comisión zanjaba la cuestión dejando claro de lo que se trata es de hacer una "revisión urgente" de la asistencia financiera pero de la que quedará excluida la ayuda humanitaria y que en principio no conlleva la suspensión de ninguna ayuda porque en este momento no estaba previsto ningún pago.

Para entonces, gobiernos como España y Luxemburgo ya habían mostrado su "malestar" por una decisión tan tajante, junto un día antes de que este martes se reúna de forma extraordinaria el Consejo de ministros de Asuntos Exteriores para tratar la situación en Oriente Próximo. El ministro español, José Manuel Albares, ha pedido incluir este tema en el orden de día de un encuentro que se celebrará este martes por vía telefónica.

Ayuda al desarrollo y humanitaria

Todo empezó cuando el comisario de Ampliación, el húngaro Oliver Varhelyi, anunciaba a primera hora de la tarde a través de la red social X que la Comisión había suspendido de forma "inmediata" todos los pagos de la ayuda al desarrollo que Palestina recibe de la UE y que asciende, dijo a 691 millones de euros. 

"Todos los pagos quedan suspendidos inmediatamente. Todos los proyectos puestos en revisión. Todas las nuevas propuestas presupuestarias, incluso las de 2023, se posponen hasta nuevo aviso. Se hará una evaluación global de todo el asunto", enumeró asertivo en la red social X, en respuesta a la escalada de "terror brutal contra Israel", por el ataque de Hamás del sábado pasado.

"La incitación al odio, la violencia y la glorificación del terror han envenenado las mentes de demasiados. Necesitamos acción y la necesitamos ya", aseveró el comisario húngaro.

Horas más tarde, tomaba la palabra el comisario de Gestión de Crisis, el esloveno Janez Lenarcic, para asegurar que la Comisión mantendrá la ayuda humanitaria de la UE a los palestinos, de la que él es responsable, "todo el tiempo que sea necesario".

"Si bien condeno enérgicamente el ataque terrorista de Hamás (contra Israel), es imperativo proteger a los civiles y respetar el Derecho Internacional Humanitario", decía también a través de la red social X el comisario Lenarcic.

La cuestión ha quedado zanjada a última hora de la tarde, por medio de un comunicado oficial en el que la Comisión indica que ambas cosas son posibles y que hará una "revisión urgente" de la asistencia financiera que recibe la Franja de Gaza de la UE, que "no afecta a la asistencia humanitaria" que la UE concede a través del programa ECHO.

Según ha explicado, el objetivo de esta revisión es "asegurar que ninguna ayuda de la UE permite indirectamente a ninguna organización terrorista llevar a cabo ataques contra Israel". Además, la Comisión también revisará, si "a la luz de que las circunstancias sobre el terreno han cambiado", tiene que "ajustar" sus programas de ayuda a la población palestina y a la autoridad Palestina.

Malestar en el Gobierno

Para cuando la Comisión ha hecho oficial su planteamiento, la posibilidad de cortar la ayuda europea ha provocado el rechazo de algunos países. El primero en dejarlo claro fue el ministro de Asuntos Exteriores de Luxemburgo, Jassen Asselborn, que recordó a la Comisión que la decisión de si congelar la ayuda corresponde a los gobiernos de la UE, en el Consejo de la UE, y que, en todo caso, era una "mala idea" lo que consideró un "castigo colectivo" a toda una población que necesita ayuda.

La posibilidad de cortar la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza tampoco ha gustado nada en España, donde ha provocado "malestar" y dio lugar a una conversación telefónica entre Albares y el comisario Varhely en la que el ministro le ha trasladado "su desacuerdo con esta decisión, que no conocían los ministros de Exteriores", indican fuentes de Exteriores.

Asimismo, Albares ha pedido al Alto Representante de la UE, Josep Borrell, que incluya una discusión sobre esta cuestión en la agenda del Consejo extraordinario de ministros de Asuntos Exteriores que se celebrará este martes para hablar de la situación en Israel y los territorios palestinos.

En su comunicado de este lunes, la Comisión ha dejado clara que esta revisión de la ayuda se hará "lo antes posible" y en coordinación con los Estados miembros y ha aclarado también que de momento no tendrá efecto en la llegada de asistencia a los territorios palestinos, puesto que en estos momentos no había pagos previstos, "de modo que no se suspenderán".